Conoce cómo cultivar diferentes especies nativas con potencial como plantas ornamentales. Por Martha Riat y Gustavo Sánchez*
La Patagonia cuenta con gran cantidad de especies nativas herbáceas de interés ornamental, las cuales presentan una oportunidad para el desarrollo de nuevos productos comerciales y despiertan un creciente interés en las tendencias actuales del paisajismo.
En la Tecnicatura en Viveros de la Universidad Nacional de Río Negro, se vienen desarrollando experiencias de reproducción y cultivo en vivero de especies nativas de la Patagonia con potencial ornamental para la región. Ya se evaluaron más de setenta especies, de las cuales, veintiséis, son subarbustos en cojín y plantas herbáceas, muchas de ellas en roseta, con diferentes niveles de avance en la definición de criterios de producción para cada una de ellas.
Los estudios se centraron en algunos aspectos importantes a abordar en la problemática planteada para el desarrollo de nuevos cultivos: obtención del material, propagación por semillas, propagación agámica, cultivo en contenedor, desarrollo de tecnología de manejo de los cultivos y estandarización de la producción.
En este artículo, se presentan avances y consideraciones vinculadas a la producción de seis especies de interés, tanto por su potencialidad ornamental como por su comportamiento bajo condiciones de cultivo en contenedor a partir de la reproducción por vía sexual.
Una de las más destacadas en cuanto a su comportamiento en cultivo y su desempeño en jardines es el Senecio gilliesii Hook. et Am var. dasycarpus (Asteraceae). Habita en suelos arenosos, generalmente húmedos de la estepa patagónica y en los cerros áridos. Hierba perenne, rizomatosa, grisácea de hojas espatuladas, con bordes ondulados. Follaje muy vistoso por su textura, color y persistencia durante todas las estaciones del año (Ferreyra et al, 2012).
Ha demostrado, durante cuatro ciclos de crecimiento, su capacidad de adaptación al cultivo en contenedor; florece durante el segundo ciclo de crecimiento. La germinación resulta más homogénea si se realiza un breve tratamiento de estratificación frío-húmeda. Su cultivo en bandejas multiceldas, durante la primavera y con fertirrigación, permite en dos meses su paso a contenedor nº 14. Durante la primavera siguiente, comienza su floración y se repite cada año. Forma rosetas densas que se deslucen brevemente en el período de floración, revegetando en la posmaduración de los frutos. Su calidad ornamental se sustenta en la calidad del follaje y la densidad de los capítulos amarillos durante la floración, en noviembre-diciembre, en la Patagonia norte.
Silene andicola Gillies ex Hook. & Arn. (Cariofilaceae). Es una especie endémica de los Andes patagónicos. Esta herbácea, perenne, se encuentra naturalmente por encima del límite del bosque, en áreas húmedas de alta montaña. Es una hierba arrosetada con tallos floríferos de hasta 30 cm de altura, con rizomas (Hoffman et al, 1998). En áreas de menor altitud, su floración es en noviembre y diciembre; sus frutos-cápsula producen una gran cantidad de semillas. La germinación es rápida y no requiere tratamientos especiales. Florece en el segundo ciclo de crecimiento generando una mata rizomatosa que cubre rápidamente el contenedor. Su desempeño como ornamental es excelente, con muy buen desarrollo en canteros y rocallas; rebrota en septiembre, en áreas urbanas de Patagonia.
Adesmia corymbosa Clos var. corymbosa (Fabaceae). Habita en los ambientes de la estepa y alta montaña. Es una hierba perenne de hasta 30 cm de altura, muy ramificada desde la base, con ramas erectas o decumbentes, con follaje pubescente gris o plateado y flores amarillas en densas inflorescencias, con escapos cortos (Ferreyra et al, 2012). Las semillas tienen cubiertas impermeables y, aplicándoles una escarificación con hoja de lija y remojo durante 24 horas, se obtiene una germinación más homogénea y con mayores porcentajes. Con el repique en primavera, a bandeja multiceldas a los sesenta días de iniciada la germinación, se logra un buen establecimiento de las plántulas y, con un reenvasado a contenedor nº 14, cubre el contenedor en la primera temporada de crecimiento, y florece en la segunda temporada de cultivo.
Calceolaria filicaulis Clos ssp. Filicaulis (Calceolariaceae). Es una hierba perenne con tallos floríferos de hasta 40 cm de alto, en rosetas individuales o con tallos que se desarrollan, en forma horizontal, formando tupidos cojines. Habita en los ambientes húmedos de alta montaña y en los bosques húmedos de altura entre 1700 y 2400 msnm (Darwinion). Produce gran cantidad de semillas extremadamente pequeñas, que germinan con facilidad. Las plántulas generan muy rápido pequeñísimos rizomas, que dificultan el repique, si bien se adaptan muy bien al contenedor. Florecen rápidamente durante la primera estación de crecimiento, si se maneja correctamente la fertilización. En su segundo ciclo, genera varias coronas que florecen generando numerosos escapos florales por contenedor. Su comportamiento en jardines permite el correcto establecimiento y la propagación en canteros floreciendo persistentemente.
Senecio subdiscoideus Sch. Bip. ex Wedd. (Asteraceae). Es un subarbusto perenne con rizoma ramificado de hasta 20 cm de altura, con flores amarillas reunidas en capítulos fácilmente reconocibles por el color morado de sus tallos, escapos florales e involucro de brácteas. Habita en pedreros de alta montaña de los Andes patagónicos. El porcentaje de germinación se incrementa con un tratamiento de estratificación frío y húmedo durante sesenta días. Realizando un repique temprano a bandeja multiceldas, un reenvasado a los dos meses a contenedor nº 14 y el cultivo en canchas exteriores a sol pleno, se obtienen plantas compactas y una floración en la segunda temporada.
Senecio argyreus Phil.(Asteraceae). Es un subarbusto de 30 a 50 cm de altura con tallos ascendentes y hojas densamente seríceas, con tomento plateado algo amarillento o dorado. Capítulos radiados, solitarios en los ápices de los tallos con flores marginales amarillas y flores del disco tubulosas. Aquenios con papus de pelos simples (Ferreyra et al, 2012). Habita en pedreros de alta montaña, en lugares abiertos, en los bordes del bosque. La germinación resulta más homogénea si se realiza un tratamiento de estratificación frío-húmeda durante treinta días. Su cultivo en bandejas multiceldas durante la primavera, con fertirrigación y un reenvasado a contenedor nº 14, a sol pleno, con un manejo de poda de formación, permite obtener plantas compactas y una floración en la segunda temporada.
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Consideraciones generales
Uno de los aspectos más importantes a considerar para el cultivo de estas especies en vivero es el establecimiento de las plántulas y la supervivencia posterior al repique. Los repiques tempranos permiten, en poco tiempo, establecer el cultivo en canchas exteriores y a pleno sol, ya que al ser en su mayoría plantas heliófilas, la luz es determinante en la forma de crecimiento desde las primeras etapas de cultivo.
El tamaño del contenedor es importante para lograr un buen desarrollo radicular y, en el caso de las especies en roseta que poseen rizomas, posibilita un rápido aumento del diámetro de cobertura de la parte aérea.
En cuanto al desarrollo de las estructuras vegetativas de las especies herbáceas en cojín, los manejos de poda de formación permiten obtener ejemplares compactos como una de las características de plantas con calidad comercial y uno de los atributos más buscados por los consumidores.
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Ingeniera agrónoma Martha Riat y
Téc. Viverista Gustavo Sánchez, docentes e investigadores de la Universidad Nacional de Río Negro y del Instituto de Investigaciones en Recursos Naturales, Agroecología y Desarrollo Rural, dependiente de la UNRN.
Bibliografía:
Ferreyra M., Green L., 2012. Flores de la Estepa Patagónica. 1a ed. Vázquez Mazzini Editores. 288 p.
Hoffmann A., Arroyo M., Liberona F., Muñoz M. y Watson J. 1998. Plantas Altoandinas de la Flora Silvestre de Chile. Ediciones Fundación Claudio Gay. 281p.
Darwinion, consultado 10/12/19 http://www.darwin.edu.ar