Cómo desinfectar suelos y sustratos de forma sustentable

Primera parte. Alternativas físicas: vapor de agua (unidad móvil de desinfección de suelos y sustratos, sistema de púas y Móvil-Vap), solarización (cobertura plástica por 30/35 días y colector solar). Por Analía Puerta*

• Vapor de agua

Esta técnica consiste en hacer pasar vapor de agua por el suelo o sustrato. El agua es calentada a través de una caldera. El efecto de control se logra debido al aumento de la temperatura que se produce en el suelo o sustrato.

-Unidad móvil de desinfección de suelos y sustratos (UMDSS): este equipamiento está compuesto, básicamente, por una caldera que genera vapor y un sistema que conduce a este hacia las placas metálicas colocadas sobre la superficie a desinfectar. Las UMDSS han presentado dificultades técnicas y económicas para la desinfección de suelo en las condiciones edáficas y socioculturales de la Argentina. Por ello, para la desinfección de suelos se ha descartado su uso, casi en general.

Sin embargo, en el sector ornamental, ha tenido mejor adopción por parte de los productores, y se ha constituido en una alternativa para la desinfección de sustratos, ya sea por medio del equipamiento entregado por el proyecto, como a partir de otros equipos de similares características. Se trabajó, junto con los productores, en la reconversión de estos equipos, realizando modificaciones que permitieron el uso a través de un sistema fijo y alimentado a gas natural.

-Sistema de púas: este radica en la inyección de vapor sobre un sustrato mantenido en un contenedor.

-Movil-Vap: consiste en un rastrillo que inyecta vapor a medida que se desplaza por el suelo o sustrato siendo traccionado por un malacate. Este equipo es un desarrollo privado, perteneciente a un productor de flores de corte de Santa Fe, quien ha trabajado con el apoyo del proyecto para su implementación en el resto del país como en otros países (Brasil, Colombia).

De esta forma, y mediante las modificaciones mencionadas, se dio utilidad al equipamiento adquirido por las Naciones Unidas y entregado por el proyecto. Actualmente, veinte asociaciones de productores, ubicadas en diferentes partes del país, disponen de estos equipos, los cuales fueron cedidos, en principio, en comodato y, posteriormente, en forma definitiva, a las asociaciones mencionadas.

Por lo expuesto, la técnica de vapor, con las consideraciones mencionadas, es otra alternativa para la desinfección de sustratos, especialmente utilizados en el sector ornamental. 

• Solarización

-Cobertura plástica por 30/45 días: La solarización es un método de desinfección que utiliza la energía solar. La superficie para desinfectar se cubre con un plástico transparente durante 30 a 45 días, con el objetivo de retener la radiación solar y producir un aumento de temperatura que permita suprimir o eliminar los organismos patógenos. El polietileno puede ser colocado en cobertura total o sobre los lomos del cultivo, dependiendo del grado de infestación del sitio.

Se comprobó que es fundamental considerar las siguientes pautas de manejo a fin de lograr su eficacia: el suelo debe estar muy bien preparado, desterronado, y permanecer húmedo durante el período de solarización a fin de conseguir el aumento en la sensibilidad de los patógenos y mejorar el pasaje del calor. De esta forma, la solarización es efectiva contra un amplio espectro de organismos, tales como hongos, malezas, nematodos, insectos y bacterias.

También se descubrió que este método causa cambios complejos en las propiedades físicas, químicas y biológicas de los suelos, que mejoran el crecimiento y desarrollo de los cultivos implantados.

Como se mencionó, si bien el éxito de la solarización depende de varios factores, lo esencial es la preparación del suelo, la humedad de este, el tiempo de exposición y la temperatura lograda durante el período de exposición. El poder de control está supeditado al lugar y a la fecha en que se realice. Se han logrado muy buenos resultados en lo que hace al control de organismos patógenos en los lugares que cumplen estas características.

Así, esta técnica ha sido adoptada masivamente por los productores de hortalizas bajo cubierta en el noroeste y noreste del país, debido a que allí las condiciones ambientales y los ciclos de cultivo son propicios para esta alternativa.

En regiones templadas, como la provincia de Buenos Aires (cinturones verdes y Mar del Plata), la adopción de la solarización se vio dificultada porque el momento en que podría realizarse coincide (período primavera-estivo-otoñal) con el tiempo de realización de los cultivos más importantes comercialmente, como tomate y pimiento, y que justifican el costo de los invernáculos. Por ello, en estas regiones, la combinación de la solarización con otras prácticas de manejo, como la incorporación de materia orgánica (biofumigación o biosolarización), se ha convertido en una alternativa de creciente adopción, en especial, en productores que realizan un manejo de tipo agroecológico.

 -Colectores solares: esta preferencia de desinfección también se basa en emplear la radiación solar con el propósito de elevar la temperatura y conseguir la eliminación de patógenos y las plagas presentes habitualmente en los suelos o sustratos. Se lo deja 24 horas a pleno sol.

El equipamiento comprende una caja de madera de un metro por un metro, que contiene tubos metálicos pintados de color negro, donde se coloca el material a desinfectar. En su parte superior, la caja es cubierta por un polietileno transparente, y montada sobre un pie, de modo que permita modificar su inclinación y aumentar, de esta manera, el aprovechamiento de la radicación incidente.

Este equipamiento fue desarrollado por la firma Empresa Brasileira de Pesquisa Agropecuária (1991). En 2008, la tecnología fue ingresada a la Argentina por el proyecto Tierra Sana y evaluada en diferentes localidades, con distintas mezclas de suelo y sustratos.

El colector solar es una alternativa eficiente para la desinfección de sustratos y ha sido adoptado especialmente por productores de plantines ornamentales y hortícolas de Buenos Aires y de Córdoba.

Lee en nuestra edición de octubre: “Alternativas biológicas y alternativas químicas”, y, en nuestra edición de noviembre, “Prácticas y tecnologías complementarias”.

 

* Analía Puerta, coordinadora nacional de Tierra Sana (INTA-ONUDI).