Cómo identificar un compost de calidad

ESPACIO DE PUBLICIDAD La Ing. Agr. Verónica Pérez, responsable técnica de la firma Biofertyl SRL, que fabrica los sustratos y enmiendas orgánicas Rincón Verde, presenta las características que debe tener este producto.

En la actualidad, hay en el mercado una gran variedad de compost. Por tal razón, es importante que el usuario final de este tenga las herramientas teórico-prácticas para determinar si está frente a un producto de calidad o no.

En líneas generales, debería prestar atención a algunas cuestiones tales como: apariencia y olor aceptable, higienización correcta, características homogéneas y uniformes. No obstante, lo más importante es que la calidad adecuada del compost depende del empleo  que se le vaya a dar a este.

Los diferentes usos pueden ser:

• - Sustrato de cultivo en contenedor

• - Sustrato específico

• - Sustrato de cultivo en semilleros

• - Enmienda orgánica

• - Mulch

La realidad es que la calidad del compost está en manos de cada elaborador y en la seriedad que este le ponga al proceso de compostaje. La regla es sencilla: “materiales iniciales de compostaje de calidad darán como resultado un compost de calidad”. También, es clave que el proceso de compostaje esté bien hecho (se asegure alcanzar temperaturas elevadas mayores a 60°C durante cierto tiempo para garantizar la higienización). Así  como es indispensable un correcto almacenaje del compost hasta su venta.

Estos aspectos resultan ajenos al usuario final, pero, al menos, puede elegir entre elaboradores inscriptos en el SENASA, con una marca y trayectoria en el mercado, y sobre todo, con  experiencia en la elaboración. Asimismo, es posible seguir un lema: “lo barato sale caro”; y ser conscientes de que difícilmente el producto más económico del mercado sea el de mejor calidad, ya que un resultado de calidad tiene costos diferentes y conlleva un especial cuidado.

¿Qué puede identificar fácilmente el usuario final?

• Propiedades físicas

Humedad: la humedad debe oscilar entre el 35-45 %. Los compost con humedad menor al 35 % pueden no estar totalmente estabilizados o pueden haber sido almacenados durante mucho tiempo en condiciones inadecuadas. ¿Cómo los identificamos? Generalmente se pulverizan y son de manejo desagradable. Por encima del 50 % de humedad, el peso del compost repercute en el manejo y en el transporte. ¿Cuál es una regla sencilla para determinar el óptimo grado de humedad? Si se toma un puñado de compost y se presiona el mismo cerrando el puño de la mano, y, al abrirla, se forma un “pancito” que se desarma luego, con facilidad, con el dedo pulgar, entonces, esto indica una correcta humedad.

Densidad aparente: el compost (línea jardín – uso profesional) se comercializa en volumen, es la relación entre el peso del material y el volumen (kg/dm³). Por lo general, los compost presentan una densidad aparente de 400 a 700 Kg/m³. Para ser prácticos, si comprara una bolsa de 25 dm³, esta debería pesar entre 10 y 17.5 kg.

Granulometría y porosidad: Imaginen bolitas, pelotitas de golf y pelotas de tenis, mezcladas en un recipiente. La porosidad puede ser intraparticular (cuando los poros están en el interior de partículas sólidas -si estas pelotitas tuvieran poros-) o interparticular (cuando es entre las distintas partículas, los espacios que quedan libres entre cada pelota de diferente tamaño). La intraparticular depende de la naturaleza física y química del material; y la interparticular depende del tamaño de partículas y de su distribución. Esto afecta el balance de agua y aire en los sustratos. Se prefieren los compost con textura media a gruesa, porque esto implica retención de agua fácilmente disponible y adecuado contenido de aire.

Olor: La presencia de olores desagradables puede indicar que el producto no está bien compostado (condiciones anaeróbicas o fases iniciales del proceso); muchos de los ácidos orgánicos olorosos pueden ser tóxicos para las plantas. El olor del compost maduro es similar al de la tierra mojada.

Color: el color adecuado es marrón oscuro, casi negro.

Contenido de inertes: el compost se produce a partir de materiales residuales que no siempre están libres de elementos inertes o impurezas: plásticos, metales y vidrios no deberían aparecer.

• Propiedades químicas

Existen dos parámetros básicos que se pueden encontrar en el marbete de cada producto:

pH: el pH tiene una incidencia directa sobre la disponibilidad de nutrientes, entre otros aspectos. Los valores adecuados deben estar próximos a la neutralidad o ligeramente ácidos.

CE: la conductividad eléctrica es indicador de la presencia de sales solubles que existen en el compost. Altos contenidos de sales pueden repercutir en la germinación de semillas y en el desarrollo de la planta. Niveles de salinidad bajos son adecuados (< 1 mS/cm) para plántulas y menor a 1,5 mS/cm para plantas más grandes.

Será necesario que el usuario final conozca o pida asesoramiento al viverista acerca de los requerimientos de la planta que desea cultivar; esto definirá los parámetros que deberá contemplar a la hora de evaluar su compost. Con sentido común, se debería tener en cuenta que la etapa de germinación y de plántula de un cultivo es la más sensible y crítica; en este período, las pequeñas plántulas solo aceptarán un compost de calidad y ¡se lo harán saber!

Más información: www.biofertyl.com.ar